Siguiendo la estela de Cap d’Antibes y Egypt, Mémoires de Mustique fue otro souvenir olfativo de Albert Fouquet que ahora rescata la casa Eight & Bob para añadirla a su colección. Mustique, una idílica isla del Caribe perteneciente a San Vicente y las Granadinas, donde el tiempo se detiene y el mundanal ruido parece quedar muy lejos. Hasta allí nos quiere llevar esta fragancia, y lo consigue, vaya si lo hace. Un exceso de petit grain, conocido también como la hoja del naranjo, fresco y verde, junto con el suave neroli y el dulce azahar, representando casi la totalidad de la anatomía del cítrico árbol. El resultado, una fragancia con un frescor estimulante, con el que apetece rociarse de arriba abajo para viajar hasta donde nuestra imaginación nos lleve.
