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Dándole una vuelta al aftersún de toda la vida, Quinque ha querido hacer algo nuevo, algo fresco, hidratante, gustoso, pero nuevo. Querían que hiciera lo que se espera de un aftersún, aliviar la piel e hidratarla, pero mejor: que hidratara y retuviera esa hidratación, que aliviara reforzando además la barrera cutánea, y que lo hiciera profunda e inmediatamente. Y así han creado Water Bomb Mask.
Esta mascarilla facial es una bomba de hidratación cargada de ácido hialurónico de diferente peso molecular que penetra en la piel mejorando su hidratación, elasticidad y suavidad, y enriquecida con activos que refuerzan la barrera cutánea y contribuyen a retener la hidratación de la piel. La fórmula impregna un tejido innovador 100% natural a base de algodón y fibras de frutas muy cómodo de aplicar. La sensación de frescor y alivio y la hidratación son inmediatas, lo que la hace idónea después de la exposición al sol o de la realización de tratamientos estéticos.
