Oud

Hablemos claro: el oud es una putrefacción que se crea cuando el hongo Phialophora Parasitica infecta el árbol de la Aquilaria. Entonces se crea una especie de resina negra del tamaño de una alubia muy muy aromática que se llama oud y es tan preciada porque es muy escasa (la mayoría de los perfumes llevan ouds sintéticos o recreaciones utilizando otras esencias) y porque al ser tan perceptible se puso de moda hace unos años. Que hablando aún más claro, el oud puro tiene unos dejes fecales bastante marcados, pero bien trabajado se consigue esa magia adictiva que está al alcance de pocos.

Y entre toda esta sobreproducción de fragancias de oud que lo han distorsionado en cierta manera, todavía se encuentran joyas a las que volver una y otra vez: