Entre Niza y Mónaco, se encuentra Villa Kérylos en un pequeño cabo con privilegiadas vistas al Mediterráneo. Allí, alrededor de la magnífica casa, se presume un jardín verde, lleno de higueras y sicómoros, que generosos entregan su sombra para dar cobijo del sol. Jardins de Kérylos es una higuera verde, muy verde, pero que no pierde su esencia. Hilada fino, llega a encumbrar el aroma verde-frutal en una delicatessen superior que hará las delicias de los fanáticos y convencerá a los que aún no conocían su adictiva fragancia.